La DGT toma medidas drásticas: Adiós a los grupos de WhatsApp y Telegram que avisan de controles de tráfico

La Dirección General de Tráfico (DGT) está decidida a acabar con los grupos de WhatsApp y Telegram que alertan sobre controles de tráfico, una práctica cada vez más extendida entre los conductores que buscan evitar sanciones. El Ministerio del Interior ya había anunciado la prohibición de estas prácticas y ahora la DGT ha confirmado que están monitorizando activamente las alertas que circulan en estos grupos de mensajería.

El objetivo de los controles de tráfico

Los controles de tráfico, especialmente los de alcoholemia, son herramientas clave para reducir los accidentes en carretera. Cuando los agentes paran a un conductor, le someten a una prueba de alcoholemia para verificar si conduce con niveles de alcohol en sangre por encima del límite legal. En España, este límite es de 0,5 gramos por litro, pero el gobierno está estudiando la posibilidad de reducirlo aún más, hasta los 0,2 gramos por litro. Las sanciones por superar estos límites pueden ir desde multas económicas hasta la pérdida de puntos en el carnet de conducir, e incluso la retirada del mismo.

El propósito de estas medidas es claro: concienciar a los conductores para que no pongan en peligro su vida ni la de otros usuarios de la vía. Sin embargo, no todos los conductores están dispuestos a cumplir con estas normas, sobre todo aquellos que intentan eludir los controles utilizando grupos de mensajería instantánea para compartir información sobre su ubicación.

Grupos de WhatsApp y Telegram: ¿Solución o problema?

Aunque estos grupos de WhatsApp y Telegram puedan parecer una solución rápida para evitar multas, lo cierto es que solo contribuyen a agravar el problema. Al advertir a otros conductores sobre la ubicación de los controles, se fomenta la conducción bajo los efectos del alcohol y, por ende, se incrementa el riesgo de accidentes. De hecho, muchas personas que han consumido alcohol prefieren utilizar estos atajos en lugar de optar por alternativas más seguras como el transporte público, taxis o incluso caminar.

La DGT y el Ministerio del Interior están trabajando para poner fin a esta práctica y, con ello, reducir el número de accidentes mortales relacionados con la conducción en estado de embriaguez. Una de las medidas en estudio es la modificación de la legislación, de forma que avisar de un control de tráfico pase a ser una actividad sancionable.

Monitorización y sanciones: El fin de los avisos

En la actualidad, los avisos en grupos de WhatsApp y Telegram sobre controles de tráfico no son técnicamente ilegales. No obstante, esto cambiará pronto. Según declaraciones de la DGT, algunos de estos grupos están siendo vigilados de cerca, y ya se han comenzado a imponer las primeras sanciones a quienes gestionan o administran estas plataformas.

Un claro ejemplo es el caso de una empresa que operaba una aplicación destinada a informar sobre los controles de tráfico y otras actividades policiales. Además, en Galicia, un administrador de un grupo de WhatsApp con más de 15.000 usuarios ha sido sancionado por compartir información sobre controles en la región de Costa da Morte.

Estas primeras sanciones son solo el comienzo de una campaña más amplia para erradicar este tipo de prácticas y garantizar que los conductores respeten las normativas de seguridad vial.

¿Cómplices de accidentes mortales?

El director general de la DGT, Pere Navarro, ha sido claro al respecto: aquellos que avisan de los controles de tráfico son cómplices de los accidentes que puedan producirse. En una reciente entrevista en el programa Las tardes de RNE, Navarro señaló que las autoridades son conscientes de esta práctica desde hace tiempo y que, hasta ahora, lo habían gestionado cambiando la ubicación de los controles cada veinte minutos. Sin embargo, la situación ha llegado a un punto en el que se necesita una intervención más contundente.

Navarro hizo un llamado a la responsabilidad de los conductores, subrayando que aquellos que avisan de un control de alcoholemia a otros conductores podrían estar facilitando un accidente mortal. Si un conductor ebrio, que debería haber sido detenido en un control, es advertido y cambia su ruta, la persona que dio la alerta podría ser, en parte, responsable de cualquier tragedia que ocurra posteriormente.

Nuevas estrategias para luchar contra la conducción bajo los efectos del alcohol

La DGT ha implementado su nueva estrategia de monitorización y sanción en Galicia, pero pronto se extenderá a otras regiones de España. Este enfoque más proactivo busca disuadir a los conductores de utilizar las redes sociales y aplicaciones de mensajería para eludir las normativas de tráfico.

La campaña no solo apunta a las personas que administran los grupos de WhatsApp y Telegram, sino también a los conductores que utilizan estas alertas para evitar ser detenidos en los controles de alcoholemia. La idea es que, al aumentar las sanciones y la vigilancia, los conductores reconsideren la opción de beber y conducir.

El mensaje de la DGT es claro: conducir en estado de embriaguez no solo es ilegal, sino que pone en riesgo la vida de todos los usuarios de la carretera. Y ahora, además, aquellos que avisan de los controles también tendrán que rendir cuentas por sus acciones.

El futuro de los controles de tráfico

A medida que el gobierno sigue endureciendo las normativas de seguridad vial, es probable que veamos más medidas restrictivas para acabar con este tipo de comportamientos. Los grupos de WhatsApp y Telegram que alertan de controles de tráfico tienen los días contados, y con su desaparición se espera que los conductores adopten comportamientos más responsables al volante.

La seguridad vial es una prioridad para la DGT, y acabar con los avisos en redes sociales es solo uno de los muchos pasos que se están tomando para reducir los accidentes de tráfico. La vigilancia, las sanciones y las campañas de concienciación seguirán siendo las principales herramientas para combatir la conducción bajo los efectos del alcohol.